Curiosidades Publicado el 29.10.2019

Gastronomía de Venezuela: un mundo colorido, aromático y sabroso

¿Por qué son tan populares las arepas?

Las arepas, archiconocidas alrededor del mundo, son solo una muestra de la amplia variedad de delicias que salen de la cocina venezolana. Se trata de una gastronomía labrada a través del tiempo y de la fusión de las antiguas recetas indígenas, basadas únicamente en productos locales, con los platos propios de los africanos llevados a trabajar en las plantaciones y los aportes culinarios europeos. Por eso incluye recetas tan diferentes entre sí, aunque unidas por el lazo invisible del cariño y el cuidado que ponen los venezolanos al preparar sus comidas. Créelo, lo sientes al saborear cada bocado.

Platos deliciosos representativos de la Pequeña Venecia

Uno de los platos más típicos de Venezuela es el pabellón criollo ó pabellón venezolano. Se ha preparado y degustado a lo largo de la historia del país, y lleva arroz blanco, carne mechada, caraotas (alubias) negras y rodajas de plátano frito. Estos ingredientes se disponen en el plato con arte, y logran despertar los sentidos y hacer latir con fuerza el corazón del comensal.

Plato de Pabellón venezolano

El asado negro, muy popular en Caracas, surgió probablemente del descuido de alguna cocinera que se despistó y la carne se pasó de dorado. Y tuvo que arreglar el desaguisado. El plato que resultó del azar es una carne vacuna suave y tierna por dentro, con una sabrosa costra casi negra y bañada en salsa oscura entre amarga y dulzona, simplemente irresistible. Tradicionalmente se acompaña con arroz en blanco y plátano frito, aunque también queda fantástico con patatas al horno o puré de patatas. Y, si quieres un plato bajo en calorías, tómalo con verduras y lo adorarás.

Cuando hace frío o siempre, si te gusta el caldo, los hervidos de la cocina de Venezuela te proporcionan platos reconfortantes y deliciosos. En la región central se acostumbra a preparar el hervido de gallina, que logra que te vuelva el alma al cuerpo cuando estás casi a punto de congelación. También se prepara con carne vacuna como, por ejemplo, la sopa de rabo. En cualquier caso, se le añaden verduras, tubérculos como patatas y yuca, jojotos (maíz tierno), cilantro, hierbabuena y perejil para aromatizar, y se aliña con un sofrito. Espectacular. Y también está la fosforera, una contundente sopa de mariscos con tomates y pimientos dulces, típica de la isla Margarita. Cuenta la leyenda que es afrodisíaca.

Así como en México elaboran distintas tortillas, en Venezuela preparan casabe y cachapa. Sí, además de las arepas. Se llama casabe a unas tortas grandes, finas y crujientes hechas en base a yuca. Llamadas también pan de yuca, te aportan vitaminas, hidratos de carbono, fibra y minerales, así que se trata de un acompañamiento perfecto para las comidas de la dieta de los deportistas y las personas muy activas.

Arepas con diferentes rellenos

La cachapa, por su parte, es la transformación del maíz muy tierno en tortas dulzonas, deliciosas y suaves, similares a las filloas. Se acompañan con queso de mano (queso fresco). Si quieres darte un capricho, las puedes untar con mantequilla, que solo se vive una vez. O prueba una chalupa de pollo, un plato parecido a la lasaña que se hace con cachapas. Cuidado, pueden provocar una sana adicción. Cuando quieras picar algo mientras miras un partido, apuesta por los tequeños y disfruta de la vida.

Las caraotas negras o alubias negras constituyen un plato primo hermano de la fabada asturiana, aunque de carne solo lleva tocino cortado pequeño. Además, le ponen cebolla, pimiento, ajo y, aunque te sorprenda, también le añaden "papelón" o panela, que es el zumo de la caña de azúcar hecho bloque. Es un plato nutritivo que derrocha sabor. Tanto como el mondongo, que es una versión de los callos españoles con "paticas de cochino", repollo, auyama (calabaza), jojotos y alcaparras. Hay que probarlo.

Un plato de fiesta y los dulces para los golosos

La hallaca es una verdadera obra de arte de la cocina venezolana. Son infaltables en las mesas navideñas de Venezuela y de los venezolanos que residen fuera del país. Cuando te sirven una hallaca, lo que ves es un paquetito con envoltorio de hoja de platanero, y el tesoro se descubre al abrirlo. Tiene una cubierta amarilla y tierna, de maíz, y dentro un guiso de carnes de gallina, de ternera y de cerdo, además de aderezos como pasas de uva, alcaparras, aceitunas y más, todo muy picado y adornado con pimiento en juliana, aros de cebolla, tocino, carnes en tiritas y más pasas de uva, alcaparras y aceitunas, esta vez enteras. Prueba una hallaca y te enamorará para toda la vida.

La variedad de postres venezolanos es tan extensa como la lista de los platos salados y agridulces. En ella tu espíritu dulcero puede regocijarse con postres, tartas, pasteles y otras golosinas. Las más auténticas tienen un origen indígena, y se preparan con papelón, harina de maíz y frutas, entre ellas coco, cambur (plátano) y guayaba. Además, hay dulces heredados de la época colonial, tradicionalmente elaborados por monjas y ahora por todo aquel que los sabe hacer.  Muchos resultan familiares a los paladares españoles. Entre los llamados "dulces finos" se incluyen suspiros, piñonates de piña y coco, papitas de leche envueltas en polvo de canela, las yemitas, empanadillas y pastelitos dulces, torrejitas crujientes y azucaradas, frutas abrillantadas, jaleítas cubiertas de azúcar, papeloncitos blancos, de anís o de fruta, lenguas de gato, polvorosas, turrones de leche, tocinillo del cielo y mostachones, que son unas galletas tiernitas y riquísimas.

Como ves, hay mucha vida culinaria más allá de las arepas. Tu mejor decisión, ahora que has descubierto un mundo gastronómico nuevo, original de Venezuela, es dar a conocer a tu paladar todos los platos que puedas. Pídelos con Just Eat desde tu casa a los restaurantes venezolanos de tu zona y ¡disfruta del sabor caribeño en su máxima expresión!